¿Qué es el Turismo de inmersión?
El turismo vivencial o turismo de inmersión tiene como objetivo comprender la cultura, experimentar la vida local y preferencias culinarias del destino turístico. Todo esto a través de paseos y contacto con los lugareños.
Expectativas
La idea general es acercar más al turista a la cultura y población del lugar. Los promotores del Turismo vivencial venden la idea de que eso “sí es turismo verdadero” porque eres más que un típico viajero que va y viene. Esa es la idea que venden, pero la realidad es muy diferente.
Realidad
Te dicen: nuestra empresa es de Turismo vivencial así que “tú sí vas a conocer realmente la ciudad”. Y uno se pregunta: ¿dicen eso para que me inscriba en un programa costoso en el que me ofrecen pasear por sitios que no son los típicos destinos turísticos? No lo sé, eso suena a otro paquete turístico común y corriente pero con un nombre más atractivo.
De hecho, el solo término “turismo vivencial” pareciera ser muy superficial. Viajas, haces algunas actividades programadas (nada económicas), regresas a casa, les dices a todos que tuviste “vivencias” y te sientes la persona más interesante del mundo.
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¿Por qué comprar “vivencias”?
A ver, vamos a pensarlo de marera práctica. Uno compra un boleto aéreo, un desayuno típico en un restaurante, una entrada al parque. Pero ¿comprar vivencias? ¿No se supone que lo único que necesitas para tener “vivencias” es estar vivo? entonces no deberíamos pagar grandes sumas de dinero por eso.
No quisiera que se mal interprete la idea. Sí es muy positivo querer experimentar y ver más de cerca un país o una cultura. Ciertamente el turismo debe ser más que solo ir tachando de la lista algunos lugares por visitar. Es muy bueno que la gente se interese por ir más allá y no ser el turista que se encierra en un resort. Sin embargo, para lograr ese objetivo NO necesitas caer en la trampa del marketing vivencial.
Lo malo no es la idea de tener una aventura y adentrarse a una cultura o ciudad. Lo verdaderamente negativo es la forma mercantilista en la que lo hacen, los altos precios y las falsas promesas.
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“Turismo” y nada más
Si de verdad estas interesado en adentrarte en la ciudad y la cultura de tu destino turístico, investiga un poco antes de llegar al lugar, habla con los lugareños (si no conoces el idioma igual inténtalo), compra el periódico y entérate de lo que sucede, usa el transporte público, visita los mercados locales, prueba nuevas comidas. En fin, mézclate lo más que puedas con el movimiento cultural y social de la zona.
Es decir, viaja y haz turismo a la antigua. Como siempre se ha hecho durante años. Evita caer en la trampa, no te dejes seducir por los nombres rimbombantes de la industria turística. No todas las empresas de «Turismo vivencial» son iguales. Pero la mayoría solo buscan la forma de venderte algo que puedes hacer por tu cuenta a un precio mucho más elevado.
¿Alguna vez te has involucrado en este tipo de turismo? cuéntanos tu experiencia