Si estás pensando en hacer un viaje por Europa, no puedes dejar de visitar Londres. La capital del té y los pubs te espera con una increíble cartera gastronómica y turística. Prepárate para disfrutar la mejor experiencia de tu vida con esta guía que hemos creado para ti.
Londres es una de las ciudades más grandes y antiguas del mundo, no es una sorpresa la gran cantidad de monumentos y lugares que tienes para ver. Hemos elaborado un itinerario de tres días en los cuales podrás conocer los puntos más importantes de la capital británica con un presupuesto de 50 a 100 euros por día.
Día 1: Primer vistazo a la capital
Primero lo primero, si quieres conocer Londres al máximo debes pensar en dónde hospedarte. Nuestra recomendación es buscar hoteles u hostales que se encuentren cerca a las principales atracciones. La mejor opción es Westminster, este barrio es ideal para hacer turismo. Ubicado entre el Soho y el río Támesis, comprende gran parte del conocido Gran Londres, donde se encuentran los emblemáticos Big Ben, el Palacio de Westminster, el Palacio de Buckingham, la Galería Nacional y mucho más.
Dicho esto, procedamos con algunas recomendaciones para disfrutar cada día al máximo:
- Comienza tus actividades desde temprano
- Utiliza zapatos cómodos que te permitan caminar sin molestia
- Lleva una botella de agua para combatir la sed
- Ten siempre contigo un paraguas o sombrilla
- Aplica protector solar antes de salir para proteger la piel
- Una batería externa podría ser de mucha ayuda si estás todo el día recorriendo Londres
- Apóyate en una aplicación para ubicar mejor los puntos y distancias como Google Maps
- El sistema de transporte en la capital británica es excelente, úsalo si no deseas caminar
Puedes iniciar tu aventura desayunando en Kaffeine, una de las 19 mejores cafeterías de Londres, según la revista VOGUE. Tiene una excelente carta de cafés, comida y postres; además un ambiente muy acogedor.
Luego de cargar energías puedes caminar unas calles hasta el increíble Museo Soane (calle 13 Lincoln’s Inn Fields), el cual abre sus puertas al público a partir de las 10:00 A.M. de miércoles a domingo. Esta casa-museo fue el domicilio y estudio del arquitecto neoclásico Sir John Soane y cuenta con obras de gran valor; además de una estética muy peculiar que recuerda a los grabados de Piranesi. La entrada es completamente gratis.
Si deseas seguir la ruta de los museos, puedes visitar el Museo de Transporte de Londres que se encuentra a solo 641 metros o el Museo Británico que se ubica a 720 metros. Ambos tienen libre acceso, no debes pagar para entrar. Este último cuenta con recorridos gratis en español, para que no te pierdas ningún detalle. Puedes obtener mayor información aquí.
Al finalizar tu recorrido, te recomendamos caminar hasta el reconocido Covent Garden, con más de cinco siglos de historia es una de las zonas más fascinantes de Londres, donde puedes disfrutar un delicioso café u observar los pequeños puestos de los maestros artesanos.
Por la tarde, puedes almorzar en The English Grill, un bar restaurante con estética real que se ubica en la 39 Buckingham Palace Road, a pocos metros del majestuoso Palacio de Buckingham, célebre por ser el hogar de la difunta reina y el centro de las celebraciones reales. Los visitantes pueden recorrer los opulentos salones y presenciar el acto que se realiza al cambio de guardia.
La duración del tour por el palacio y los jardines es 2 horas y 30 minutos. Tiene un costo de 21.90 euros para jóvenes entre 18 y 24 años, 18.60 euros para niños y adolescentes, 33.70 euros para adultos y gratis para menores de cinco años.
Después del recorrido puedes caminar hasta el Green Park, uno de los parques más famosos de la capital británica. Tiene una superficie de 19 hectáreas, que junto a Hyde Park, St. James’s Park, Kensington Gardens y los jardines del Palacio Real, forman un espacio abierto casi continuo que va desde Whitehall hasta Kensington y Notting Hill. Su ingreso es gratuito y está abierto todo el año.
Para culminar tu tarde, puedes disfrutar en el Crystal Moon Lounge del High Tea o Afternoon Tea, una tradición británica que se remonta a principios del siglo XIX y se atribuye a la duquesa de Bedford, quien para combatir el hambre que sentía a media tarde, comenzó a pedir que junto al té le sirvieran pan con mantequilla y dulces. El hábito se extendió rápidamente y, hacia finales de siglo, servir y tomar el té entre las 3 y las 5 de la tarde ya era una costumbre consolidada en la aristocracia y la clase alta.
Al caer la noche, puedes caminar unas cuantas calles hasta el famoso Big Ben, situado en el lado noroeste del Palacio de Westminster, la sede del Parlamento del Reino Unido. La torre alberga el reloj de cuatro caras más grande del mundo y es la decimocuarta torre de reloj más alta. Es un icono cultural británico y uno de los símbolos más prominentes de la nación. Ha aparecido en cientos de películas, series de televisión, programas y documentales.
A pocos metros de distancia, se encuentra la reconocida Abadía de Westminster, uno de los edificios religiosos más significativos del Reino Unido y el lugar de sepultura de numerosos monarcas ingleses y, posteriormente, británicos. Con más de siete siglos de historia, la abadía resalta por su estilo predominantemente gótico.
Para finalizar la noche, puedes visitar el St Stephen’s Tavern Pub & Restaurant, un pub tradicional cerca del Parlamento, donde ser sirven cervezas artesanales y se escucha música variada. Una de las paradas que no puede faltar en tu travesía. Solo recuerda no beber mucho, pues nos esperan dos días más de aventuras.
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Día 2: Enamorándote de Londres
En el segundo día, iremos por un full english breakfast al Regency Café, considerado el restaurante con el mejor desayuno típico de Londres. El plato consiste en tocino, huevos, tomates fritos o a la parrilla, champiñones fritos, pan frito o tostada y salchichas, acompañado con té.
Luego de un desayuno tan contundente, te recomendamos caminar un poco por el Jardín de la Torre Victoria, un parque tranquilo con vistas al río Támesis, estatuas conmemorativas y estructuras. Cuando estés preparado, continuarás con la visita al London Eye, situada en el South Bank del río. Esta es la rueda de la fortuna más alta de Europa y la atracción turística más popular del Reino Unido con más de 3,75 millones de visitantes al año.
La duración del recorrido en el London Eye es de treinta minutos (una vuelta completa) y el precio es 36.40 euros para adultos y 33.10 euros para niños y adolescentes. Es importante mencionar que estos precios aplican en temporada baja. Si realizas tu viaje en temporada alta, los precios son 40.30 euros para adultos y 36.40 euros para niños y adolescentes. Los menores de tres años siempre entran gratis.
Existen la opción de no hacer colas, pero esta modalidad tiene un costo adicional dependiendo de la temporada. La entrada sin colas en temporada baja tiene un precio de 51.60 euros para adultos y 46.50 euros para niños y adolescentes. En temporada alta el valor es 57.20 euros para adultos y 51.60 euros para niños y adolescentes.
Por la tarde, nos alejaremos un poco de la zona que conocemos, para visitar el distrito de Tower Hamlets. Podemos tomar un taxi británico para vivir la experiencia al mejor estilo de película o ir en metro. En esta área, podrás conocer la icónica Torre de Londres, oficialmente el Palacio Real y Fortaleza de su Majestad. Se trata de un castillo histórico fundado hacia finales de 1066 como parte de la conquista normanda de Inglaterra.
La Torre Blanca, que da nombre al castillo entero, fue construida por Guillermo el Conquistador en 1078 y desde 1100, el fue usado como prisión, aunque no era este el propósito primario. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1998 por tratarse de una fortaleza del medievo normando excepcionalmente bien conservada y por su significación como centro de poder ininterrumpido durante siglos.
A pocos metro, podrás observar el magnifico Puente de la Torre o Tower Bridge. Un puente basculante y colgante construido entre 1886 y 1894, que cruza el río Támesis. Su estructura se ha convertido en uno de los símbolos más aclamados de la ciudad.
La cubierta del puente está abierta a vehículos y peatones, pero las torres gemelas, las pasarelas y las salas de máquinas victorianas no, pues forman parte de la Tower Bridge Exhibition, y para acceder hay que pagar una entrada de 12.40 euros.
Si decides tomar el tour podrás conocer la historia del puente y su construcción, además el funcionamiento de su estructura interna y el sistema de elevación por medio de una máquina de vapor que usaba hasta que fue sustituida por un sistema eléctrico en 1976.
Al finalizar el recorrido, caminarás 782 metros hasta The Shard, un rascacielos de 310 metros de altura que desde su inauguración ha definido el skyline de la ciudad. Este edificio cuenta con un hermoso mirador, conocido como The View, el cual está dividido en tres plantas, dos de ellas cerradas y una terraza descubierta.
The Shard ofrece una vista de 360°, siendo posible divisar hasta 65 kilómetros a la redonda pues su altura es casi el doble que la del London Eye. Para ingresar debes pagar una entrada valorada en 36.20 euros. Es importante mencionar que puedes realizar la compra también en la página web y obtendrás un descuento de 5.70 euros.
Al caer la noche, te recomendamos visitar el Buque HMS Belfast, un museo flotante que se encuentra anclado en el río Támesis y forma una parte importante del Imperial War Museum. Una experiencia única donde se muestran los diferentes aspectos de la vida en altamar y su participación en la Segunda Guerra Mundial.
El recorrido por el buque es muy interesante. Se visitan las nueve cubiertas del barco en compañía de una audio guía que narra los hechos históricos y militares destacables en los que se vio involucrado, además de algunas anécdotas y datos curiosos. El valor de la entrada es 26.60 euros para adultos y 23.90 euros para estudiantes y mayores de 60 años.
Para finalizar la noche, te recomendamos dos museos que te darán escalofríos. Puedes visitar The Old Operating Theatre, situado en el ático de la Iglesia de Santo Tomás, donde se muestran los horrores de la experimentación quirúrgica en el quirófano más antiguo de Gran Bretaña o Jack The Ripper Museum, un museo siniestro ubicado en una casa victoriana de seis pisos que relata las historias del asesino de East End ocurridas en 1888.
Si tienes ganas de comer, puedes visitar el restaurante Fuller’s Ale & Pie House y disfrutar una cena tradicional británica con pastel de carne y puré de patata. Conocido como Pie and Mash, este plato originario del East End se hizo muy popular entre los obreros durante la revolución industrial.
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Día 3: Despedida maravillosa
En tu ultimo día en la capital británica te recomendamos aventurarte con un puesto callejero y probar uno de sus platos más tradicionales: Los huevos escoceses. Un alimento básico de la cocina inglesa que consta de huevo cocido, rodeado de carne de cerdo, rebozado en pan rallado y frito. Se encuentra en todas partes.
Luego de desayunar puedes dirigirte al icónico Madame Tussauds Meseum, un reconocido museo con réplicas de cera de personajes históricos y celebridades. El valor de la entrada es 37.50 euros para adultos y 33.60 euros para niños y adolescentes menores de 15 años. No te puedes perder esta experiencia de hacerte una selfie con tu estrella favorita.
Al finalizar el recorrido, puedes visitar el majestuoso Palacio de Kensington, reconocido por ser en años anteriores la residencia de varios miembros de la realeza, incluida la fallecida Diana de Gales. Hoy en día, está abierto al público y exhibe una exposición fotográfica sobre la emblemática princesa.
En los alrededores del palacio, podrás encontrar el gran Hyde Park, catalogado como el mayor de los cuatro parques reales, que forman una cadena desde el Palacio de Kensington hasta el Palacio de Buckingham. En él se encuentran los lagos Serpentine y The Long Water; además de un monumento a Peter Pan, un memorial a la Princesa Diana y un memorial al Principe Alberto.
Por la tarde, puedes visitar la Plaza de Trafalgar, ubicada en el centro de Londres y construida para conmemorar la batalla en la que la armada británica venció a las armadas francesa y española frente al cabo que lleva el mismo nombre. En la actualidad, es lugar habitual de manifestaciones políticas y donde se alza la columna de Nelson.
A pocos kilómetros de la plaza se encuentra el icónico barrio Soho, que ofrece una mezcla ecléctica de restaurantes, multiculturalidad y tiendas de renombre. Las calles Dean, Frith, Beak y Old Compton son el epicentro de la actividad de día y de noche. Sin lugar a dudas, no puedes dejar de visitarlo.
Luego de conocer esta área, puedes tomar un taxi que te llevará por la A40 Road (entre 10 y 12 euros), una importante vía principal que pasa por siete distritos londinenses, hasta la Catedral de San Pablo. La edificación, fundada en el año 604 d. C. es sede de la diócesis y del obispo de Londres, perteneciente a la denominada Iglesia de Inglaterra.
La catedral de San Pablo es uno de lugares más famosos y reconocidos de Londres. Con 111 metros de altura, fue el edificio más alto de la ciudad desde 1710 hasta 1962 y en ella se celebraron acontecimientos muy importantes de la historia británica, como los funerales de Horatio Nelson, del Duque de Wellington, de Winston Churchill y de Margaret Thatcher; además de los servicios de paz que marcaron el final de la Primera y Segunda Guerra Mundial y la boda del príncipe Carlos con Diana de Gales.
Al caer la noche, te recomendamos visitar el reconocido Guildhall, ubicado a pocas calles de la catedral. Este edificio fue casa consistorial durante varios siglos y hoy es el palacio ceremonial y administrativo de la City de Londres. Es un Monumento clasificado de Grado I por su gran importancia histórica.
Para finalizar tu viaje, puedes visitar el Palacio de Winchester, construido a comienzos del siglo XIII como residencia de los obispos fue en su tiempo una de las edificaciones más exuberantes de la época, sin embargo, fue seriamente dañado por el gran incendio de 1814 que dejó sólo unas ruinas.
A pocos metros, se encuentra también la catedral e iglesia colegiata de san Saviour y santa María Overie, madre de la diócesis anglicana de Southwark y lugar de culto cristiano desde hace unos 1000 años, pues se cree que fue construida en 1086 bajo control del obispo Odo de Bayeux, medio hermano de Guillermo el Conquistador.
Si tu cuerpo aún tiene energía, puedes culminar tu viaje con broche de oro y visitar Ministry of Sound, un club nocturno emblemático de Londres que se encuentra abierto toda la noche y es pionero en el ámbito de la música dance y house internacional. Fue ubicado como el sexto mejor club en la lista de los 100 Clubs más importantes del mundo.
De esta manera, finaliza nuestro itinerario de tres días en Londres, esperamos sea de ayuda en tu próxima visita a la capital británica. Ahora, puedes leer 15 cosas que no sabías de Londres [La #10 nos cuesta creerla]